Próxima Formación Online en Experto en Kinecuántica
Evoluciona a la vanguardia. Nuevo grupo inicia en septiembre.

EVOLUCION

Tradicionalmente, la ciencia describe la evolución como un “proceso de transformación de las especies a través de cambios producidos en sucesivas generaciones”. Si aplicamos a esto el enfoque más habitual que es el darwiniano, podríamos decir  que: la evolución biológica es el conjunto de cambios en caracteres fenotípicos y genéticos de poblaciones biológicas a través de generaciones.​ Dicho proceso ha originado la diversidad de formas de vida que existen sobre la Tierra a partir de un antepasado común.​​

Muy pocas ideas han cambiado tan profundamente nuestra visión de la naturaleza como la misma idea de cambio que implica la evolución de los seres vivos. Los organismos biológicos se agrupan en unidades naturales de reproducción que denominamos especies. Las especies que ahora pueblan la Tierra proceden de otras especies distintas que existieron en el pasado, a través de un proceso de descendencia con modificación. La ciencia sostiene que la evolución biológica es el proceso continuado de transformación de unas especies en otras especies descendientes; su antítesis es la extinción de las especies que han existido. Por consiguiente, y siguiendo los lineamientos de esta teoría, tendríamos un antecesor común con cualquiera de las especies vivas de mamíferos, vegetales, moluscos, bacterias, etc. hoy existentes, aunque el tiempo hasta el organismo antecesor se remonte a más de 3000 millones de años; pero hay mucho más que tener en cuenta.

La vieja, desgastada y solo en parte aceptable, teoría de la evolución de Darwin, que en su época (1859) fue una verdadera revolución conceptual, preconizaba la supremacía de los individuos más adaptados, fuertes, capaces o resistentes como uno de los motores de la evolución y venía a decir que los más adaptados eran los ejemplares que determinaban los procesos evolutivos de los seres vivos y se refería, única y exclusivamente, a los organismos vivos conocidos en su época. 

Cronología de ocho acontecimientos relevantes de la evolución de la historia de la vida en la Tierra.

  • Origen de la célula procariota 3600 M (M=Millones de años).
  • Origen de la célula eucariota 1400 M.
  • Origen de los animales pluricelulares 650 M.
  • Fauna de la explosión cámbrica 570 M.
  • Origen de los vertebrados terrestres 360 M.
  • Extinción de los dinosaurios. Predominancia de los mamíferos 65 M.
  • Origen de Homo sapiens 0,1 M. 
  • Antropoceno. Siglo XX.

Ya en el S. XX la biología comparada, la homología y la analogía del estudio de las especies y sus características, no llevan a pensar que hay muchas más variables que las solas respuestas adaptativas al medio como respuestas evolutivas.

El ruso Priotr Kropotkin enunció la teoría del apoyo mutuo con la que propone la cooperación entre individuos y entre especies como uno de los vectores claves de la evolución con mayor importancia y transcendencia que la competencia. Sirve, como ejemplo claro de esto, el de un bosque maduro donde no es el vigor ni la fuerza evolutiva de los ejemplares más robustos, más resistentes o de mayor tamaño, el elemento que determina la evolución del bosque, sino la interacción entre todas las especies vivas, de cualquier tipo, más los factores como el suelo, el clima, el régimen de lluvias, etc., los que verdaderamente determinan la evolución del bosque y de todos y cada uno de los elementos que intervienen en el proceso global de ese bosque, destacando conceptos como el de “inteligencia vegetal” o el altruismo entre especies, que explican cómo los vegetales en formaciones complejas tienen una mejor respuesta evolutiva que, por ejemplo, en condiciones de monocultivos agrícolas.

De la idea que os propongo con este escrito, lo que creo que verdaderamente subyace, parte del mismísimo origen del universo. El cosmos como tal se generó, supuestamente, a partir del suceso denominado big-bang y, de acuerdo con la teoría de la kinecuántica,  desde ese preciso instante se generó un campo de información cuántica que acoge, desde sus inicios, primero las energías en sus diferentes formas y, posteriormente de estas energías y mediante un proceso que creemos conocer ya lo suficiente, dar lugar a lo que denominamos materia. El big bang inicio un proceso de fenomenología expansiva que continúa en acción, que es el motor de todos los cambios y evoluciones subsiguientes y que, obviamente, continúan desarrollándose. Por ello, si el universo es un fenómeno expansivo en permanente evolución. Cabe destacar aquí que, desde su inicio, el cosmos entero comenzó a organizarse siguiendo leyes y patrones que parecerían seguir los dictados de alguien o algo con una clara intención o propósito organizativo y como para lograr algo o servir a un propósito previo; desde luego yo no entiendo para qué y por qué el cosmos es tan perfecto y tan claramente organizado.  Desde mi perspectiva actual diré que: “todo cuanto contiene el universo está permanentemente evolucionando y al decir todo me refiero a todo: a la información cuántica, las energías, la materia en todas sus formas y, como no, a la vida”.

La ley del aumento de la información funcional – Esta ley referente a la evolución, vista de manera global y cósmica, pretende explicar la tendencia natural de todos los sistemas a evolucionar. Propone que la evolución en todas sus formas lleva, inevitablemente, a nuevos patrones, diversidad y complejidad en todos los sistemas naturales complejos, con independencia de la naturaleza de estos, pues esto es consecuencia de su propia naturaleza cósmica, su inserción en un sistema cósmico global en permanente expansión y, por consiguiente, de evolución.

Llevada al terreno práctico, esta teoría viene a decir que no solo están sujetos a la fenomenología y el impulso de la evolución los pinos, las ballenas o las células, también lo estarían las energías, las rocas, los gases y, en definitiva, todo cuanto existe; sea cual sea su naturaleza…

Quienes están en la vanguardia de estas investigaciones proponen tres tipos de estas formas de evolución:

  • Persistencia estática: que afectaría básicamente a átomos y moléculas.
  • Persistencia dinámica: para sistemas dinámicos con suministros continuos de energía.
  • Generación de novedad: que explicaría la tendencia de los sistemas en evolución a explorar nuevas configuraciones que les puedan llevar a nuevos comportamientos, generación o adquisición de nuevos comportamientos o características sorprendentes.

La Kinecuántica, vista desde la perspectiva de la “generación de novedad”, podría ayudarnos a entender determinados fenómenos que van apareciendo en su corto, pero intensísimo proceso evolutivo y que, mediante su observación, me ha llevado muchas veces a pensar que es como si el marco teórico de la kinecuántica evolucionara de manera autónoma e independiente de quienes la enunciamos, utilizamos, observamos, aplicamos y reflexionamos sobre ella. A veces, tengo la sensación de que ella misma se va creando y va generando nuevas propuestas, nuevos conceptos y aplicaciones para seguir evolucionando, con la finalidad de seguir siendo una hermosa e increíble herramienta de comprensión del universo que proporciona claves para mejorar la salud, la vida y la calidad de vida. Un ejemplo de esta evolución autónoma de la kine dentro del marco de  la generación de novedad, podría ser la aparición del AR, como elemento clave de la salud humana y que de seguro, no aparece hasta los años sesenta del siglo XX, los remedios Cuánticos que me llegan en 2011 o la denominada “intuición kinesiológica que aparece ya en el siglo XXI”.

“El universo genera nuevas combinaciones de átomos, moléculas, células, vibraciones, etc. Aquellas combinaciones que son estables y pueden engendrar aún más novedades,  seguirán evolucionando. Esto es lo que hace que la vida sea el ejemplo más sorprendente de la evolución, pero la evolución no afecta solo a la vida, la evolución está en todas partes, está en todo”. 

Con todo cariño:

Fernando Bernal, Kinesiologo cuántico.

Translate »